Mi yo de 98 años

Ayer recordé, un pensamiento que rondaba mi cabeza desde pequeña. Y si pudiera saber la vida desde el final para vivirla mejor ahora ? 

Esta escalera representa la vida misma, con esos escalones gastados por el uso, y el paso del tiempo, las paredes descorchadas, representan las heridas de las batallas libradas, algunas ganadas y otras perdidas.

Y en lo alto asoma una luz, esa que siempre hay al llegar el final del día. 

Esta escalera soy yo, desde mis 98 años, diré: 

“Subí. Cada día. Sin rendirme. Con una mochila cargada de experiencias, corazón y una dignidad que ni el tiempo pudo desconchar.”

Ma.Helena : mujer en movimiento, siempre.