martes, 7 de abril de 2015

Preceptos de la Terapia Gestalt



De los 9 preceptos de la Terapia Gestalt(publicados en la página de la Gestalt en Facebook, el 27 de marzo del 2015), me he permitido añadirles un texto relacionado para ampliar conceptos. Los preceptos planteados por la Gestalt los he marcado con negrita y cursiva.

Los preceptos 1 y 2 tienen un mismo texto relacionado, al igual que los preceptos 3 y 4.  Para profundizar en el precepto 6  ir al enlace indicado en el mismo.

Deseo sirva de orientación y ayuda.

María Helena Bonilla P.



1.- Vive ahora, es decir, preocúpate del presente más que del pasado o el futuro.
2.- Vive aquí, es decir, relaciónate más con lo presente que con lo ausente.

vivir nuestro momento, el ahora, de manera consciente sobre todo lo que tiene que ver con nuestras acciones, propósitos, metas , valores, por lo que esto nos hace responsables de nuestro proceder en cada momento de nuestra vida. Sino somos conscientes del ahora mermamos nuestra eficacia personal, nuestra mente es nuestro instrumento básico de supervivencia si se traiciona ésta, se reciente nuestra autoestima, la forma más simple de esta traición es la evasión de los hechos, por ejemplo :

" Sé que  no estoy trabajando lo mejor que puedo, pero no quiero pensar sobre ello"
" Sé que mi forma de comer está arruinando mi salud , pero...."
" Sé que mis hijos sufren por recibir tan poco de mi y sé que les causo daño y resentimiento, pero algún día de algún modo cambiaré....

(Libro "Los 6 pilares de la autoestima"- Nathaniel Branden, -1 pilar).

3.- Deja de imaginar: experimenta lo real.
4.- Abandona los pensamientos innecesarios; más bien siente y observa.

Cada día estoy más convencido de que el hombre sufre no por lo que le pasa, sino por lo que interpreta. Muchas veces sufrimos por tratar de darle respuesta a preguntas que taladran nuestra mente como: ¿Por qué no me llamó? ¿No piensa buscarme? ¿Por qué no me dijo lo que yo quería escuchar? ¿Por qué hizo lo que más me molesta? ¿Por qué se me quedó viendo feo? y muchas otras que por razones de espacio voy a omitir.

No se sufre por la acción de la otra persona, sino por lo que sentimos, pensamos e interpretamos de lo que hizo, por consecuencia directa de haberle dado el control a alguien ajeno a nosotros. ("No eres tú, soy yo" de Viktor Frankl, neurólogo, psiquiatra, sobreviviente del holocausto)


Las emociones son un estado transitorio de la mente. Hacen ver como importante algo que no lo es, o hacen ver como pobre algo que sí tiene importancia. Las emociones se caracterizan por ser altamente inestables y cambiantes, duran poco, pero mientras lo hacen, arrastran a quien siente hacia el dolor o a la alegría.

Las emociones son estados primarios de la mente. A tal punto son primarias, que cuando eres consciente de ellas y te sitúas en un punto firme de ti mismo, ellas desaparecen.
Son como sombras que se deshacen cuando las iluminas. La emociones son como los fantasmas; se esconden en la oscuridad, pero cuando hay luz simplemente no existen.

La mejor manera de controlar las emociones es estar atento al mismo momento donde ellas quieren aparecer. Si esperas mucho tiempo y la emoción se instaura ya no podrás desalojarla de tu mente, como cuando ensucias tu ropa con vino, por ejemplo, y no la lavas inmediatamente; entonces ya no puedes quitar la mancha.

Si aprendes a estar atento a cada cosa que haces, entonces notarás claramente cuando una emoción quiere aparecer. Notarás su presencia tan fácilmente como cuando notas que un coche aparece en la esquina de tu casa para pasar por el frente y luego alejarse. A diferencia del coche, cada que veas el nacimiento de la emoción ella desaparecerá. Ser consciente del nacimiento y muerte de las emociones es una acto de profunda claridad y estabilidad.

Las emociones son variadas; algunas te llevan a la alegría, otras al pesar. Muchas de ellas se disfrazan con atuendos de miedo o tristeza, algunas veces con pesar o llanto. Pero debes siempre saber, que sin importar cuál sea su vestimenta, siempre la atención es una luz capaz de diluir cualquiera de sus disfraces.

No es necesario “aguantar” emociones, tal como no es necesario dejar de comer o de dormir. Aguantas las emociones porque asumes que tienen vida propia. Ellas se nutren de los hábitos de pensar cotidianamente en algo insano. El primer paso para contrarrestarlas es no alimentarlas con tu pensamiento. Dedícate a atender todo lo que la vida te otorga en tu presente, y sólo ve a tu memoria cuando ese presente te lo solicite. Si así lo haces, tu mente se verá libre de tener que recordar cosas innecesarias y de vestirlas con las emociones del placer y el dolor, que suelen siempre ser el color de sus atuendos.

Más allá de las emociones hay otros mundos por descubrir. Cuando tu mente acostumbrada a merodear solo por el presente se afiance en él, entonces podrás experimentar exaltaciones estables y duraderas en el tiempo. Ellas te alimentarán y te acompañarán por siempre. (escrito por Sesha Vedanta Advaita, a través de Facebook).


5.- Prefiere expresar antes que manipular, explicar, justificar o juzgar.

Mediante un acto consciente, podemos decidir dejar de criticar " Basta con mantener constantemente la posición de testigo a fin de estar atentos a nuestras palabras y cerrar la boca cuando vaya a salir de nuestros labios una crítica inútil", Por otro lado, hemos de aprender a hacer caso omiso de las críticas que hacen de nosotros los demás. Una sensibilidad excesiva a lo que los demás piensen de nosotros es signo de una falta de control emocional. / A. Marquier no dice que no nos expresemos, dice cerrar la boca cuando sea una crítica inútil . (Libro La Libertad del Ser, Annie Marquier pág. 551).

6.- Entrégate al desagrado y al dolor tal como al placer; no restrinjas tu percatarte.

En el camino budista reflexionar sobre el sufrimiento tiene una tremenda importancia porque al aprehender su naturaleza desarrollamos una mayor resolución de eliminar tanto las causas que lo producen como los actos insanos que conducen al mismo. Eso aumentará a su vez el entusiasmo por las acciones sanas que conducen a la felicidad y la alegría.
Reflexionar sobre el sufrimiento contribuye a reducir la arrogancia. Nos ayuda a desarrollar empatía, lo que nos permite acercarnos a los sentimientos y el sufrimiento de los demás, aumenta nuestra capacidad para la compasión y nos ayuda por tanto a conectar con los demás.
Al reflexionar sobre el sufrimiento durante los momentos de bienestar, descubrimos a menudo un valor y un significado profundo en él.

Para profundizar en este punto ir al enlace : http://psicologiamh.blogspot.com.es/2011/07/el-dolor.html


7.- No aceptes ningún otro debería o tendría más que el tuyo propio.

La autoafirmación significa respetar nuestros deseos, necesidades y valores y buscar su forma adecuada de expresión. Significa valerse por si mismo y tratarse con respeto en todas las relaciones humanas. Es ser congruente entre lo que se piensa, dice y se hace.

1)La elección de ver, pensar, ser consciente, proyectar la luz de la consciencia al mundo exterior y al interior.

2) Para practicar la autoafirmación  de manera congruente se necesita la convicción de nuestras ideas y deseos más importantes.  Consiste en el conocimiento de que nuestra vida no pertenece a los demás y de que no estoy en la tierra para vivir de acuerdo con las expectativas de otra persona.

3) Y como todo, hay que llevarlo a la acción, no es suficiente tener una idea buena sino desarrrollarla, pelaearla, trabajar por ella a fin de conseguir apoyos a favor para que se aplique en la realidad la falta de esta práctica hace que muchos proyectos fracasen.

4) La autoafirmación supone enfrentarnos y luchar por dominar los retos de nuestra vida.  Cuando ampliamos nuestros límites de capacidad ampliamos nuestra eficacia personal y el respeto a nosotros mismos aumenta. Cuando nos comprometemos a nuevos ámbitos de aprendizaje, cuando asumimos tareas que nos enriquecen, aumentamos nuestro poder personal.  Nos proyectamos más lejos en el universo.  AFIRMAMOS NUESTRA EXISTENCIA. (Libro "Los 6 pilares de la autoestima"- Nathaniel Branden- 4 pilar ).

8.- Responsabilízate plenamente de tus acciones, sentimientos y pensamientos.

Tener un cierto control sobre nuestra vida nos da la felicidad y confianza en uno mismo.
El hacernos responsables de nuestros actos, de nuestra vida, decisiones, elecciones, nos aumenta el autoestima. Somos responsables  del nivel de conciencia en nuestro trabajo, de la conducta  hacia otras personas de nuestro entorno,  de la manera de  invertir nuestro tiempo,  de nuestra felicidad personal,  de los valores  bajo los cuales vivimos.  Lo que implica que el desarrollo y plan de acción sobre nuestra vida es entera responsabilidad  nuestra y la forma de cómo lo hagamos es responsabilidad  nuestra (Libro "Los 6 pilares de la autoestima"- Nathaniel Branden- 3 pilar ).

9.- Acepta ser como eres.

La práctica de la aceptación

Conlleva 3 niveles de representación

El primer nivel : aceptarse a uno mismo con un egoísmo sano, erigiéndose uno en lo primero, esto implica compromiso con uno mismo a raíz de una valoración que nos damos como seres humanos únicos.

El segundo nivel: aceptarse a uno mismo con sus virtudes y defectos, sentimientos, sueños, ilusiones, reconociéndolos conscientemente, aceptándolos como parte de nosotros, sin reprimirlos, ni avergonzarnos, una vez que uno es consciente de sus virtudes y defectos es capaz de aceptar sus errores y hacerse responsable de sus actos.

El tercer nivel : aceptarse que se ha equivocado, que se ha cometido un grave error, nos da la posibilidad de observar la razón por la que actuamos o procedimos de tal manera por lo tanto la consecuencia será la enmienda.


(Libro "Los 6 pilares de la autoestima"- Nathaniel Branden- 2 pilar).